El Ello
Ceremonia,
ase y coloca.
Respira
profundo.
Las
manos levantan sobre la cabeza
y
arquean.
Los
brazos y hombros relajados
como
si contemplaran la acción.
Mantiene,
mantiene,
mantiene,
mantiene la tensión.
Cierra
los ojos y se apunta.
Libera
la cuerda como si esta
simplemente
rebanara los dedos.
Suelta
sin intención.
El
disparo cae, se desprende.
Acierta
y es acertado.
Se
desprende de sí mismo.
Acertar
en el pecho no puede ser
mérito
del acertado.